Samper de Calanda - Venta de Valimaña (Castelnou) Teruel
Samper de Calanda, punto de partida.
La orden Cisterciense, entra en el Reino de Aragón en 1152, de la mano de Ramón Berenguer IV y el origen de esta Venta hay que buscarlo en el Monasterio de Rueda, máximo exponente de esta orden en Aragón, a escasos kilómetros de Castelnou.
La orden cisterciense, fiel a su lema monacal “ora et labora”, se dedicaron a cultivar la tierra. El éxito de su sistema radicó en una planificación eficaz del territorio y el uso de conversos como mano de obra. Esto conllevó a la fundación de granjas de cultivo, para la gestión de espacios territoriales. Estas granjas no distaban de la matriz que era el Monasterio de Rueda a mas de una jornada; y no distaba de otras grajas a más de diez kilómetros. En cada granja, se promovió el asentamiento de colonos para vertebrar el territorio, y en ella se erigían Iglesias.
La zona principal, es un extraordinario edificio de piedra sillar, que se compone de planta baja, planta noble y planta bajo cubiertas. Dispone de una bodega y de una capilla.
La zona de venta, es un edificio rectangular adosado en forma de ángulo recto al principal. En él se aprecian los espacios para pernoctar de los viajeros y para que guarden sus mercancías.
La zona de servicios, está enfrentada a la anterior y de este modo se cierra el conjunto. En él se aprecian estancias para los empleados o los legos, así como los restos de un horno de cocer pan.
Dado su estado bastante ruinoso es peligroso adentrarse en las estancias.
Samper de Calanda, punto de partida.
La orden Cisterciense, entra en el Reino de Aragón en 1152, de la mano de Ramón Berenguer IV y el origen de esta Venta hay que buscarlo en el Monasterio de Rueda, máximo exponente de esta orden en Aragón, a escasos kilómetros de Castelnou.
La orden cisterciense, fiel a su lema monacal “ora et labora”, se dedicaron a cultivar la tierra. El éxito de su sistema radicó en una planificación eficaz del territorio y el uso de conversos como mano de obra. Esto conllevó a la fundación de granjas de cultivo, para la gestión de espacios territoriales. Estas granjas no distaban de la matriz que era el Monasterio de Rueda a mas de una jornada; y no distaba de otras grajas a más de diez kilómetros. En cada granja, se promovió el asentamiento de colonos para vertebrar el territorio, y en ella se erigían Iglesias.
La zona principal, es un extraordinario edificio de piedra sillar, que se compone de planta baja, planta noble y planta bajo cubiertas. Dispone de una bodega y de una capilla.
La zona de venta, es un edificio rectangular adosado en forma de ángulo recto al principal. En él se aprecian los espacios para pernoctar de los viajeros y para que guarden sus mercancías.
La zona de servicios, está enfrentada a la anterior y de este modo se cierra el conjunto. En él se aprecian estancias para los empleados o los legos, así como los restos de un horno de cocer pan.
Dado su estado bastante ruinoso es peligroso adentrarse en las estancias.