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Pues dejo el tema abierto por aquí porque esta semana con el Tour está habiendo mucho debate sobre muchos temas, como si hay que meter etapas de pavés o son demasiado arriesgadas, el control que tienen los equipos con los pinganillos, lo poco que se mueve la carrera, etc.
Yo tengo una postura muy clara respecto a este tema. El ciclismo se está convirtiendo a pasos agigantados en la nueva Fórmula 1, está aburriendo a las ovejas. Se quiere proteger tanto al ciclista y se está metiendo tanta tecnología que esto se está convirtiendo en una competición en la que lo único que está contando a la hora de la verdad son los watios por kilo que puede mover un tío, una fórmula matemática.
No puede ser que alguien ataque y todo el mundo primero eche mano al pinganillo para que le digan lo que tiene que hacer, y a continuación eche mano al garmin para poner unos watios/kilo/hora previamente estudiados para optimizar el rendimiento.
Yo lo primero que quitaba son los pinganillos (si se quiere que emita radio vuelta de los peligros que pueden surgir) y sobre la marcha quitaba los potenciómetros (que se usen para entrenar). Y por supuesto que metía etapas de pavés, al igual que etapas ya haya nieve, lluvia o viento, porque es la única manera de darle vida a este deporte que si ha llegado a ser lo que es ha sido por la épica (y el riesgo) que lo rodea, al igual que pasaba en la F1.
Y alguno me dirá que lo primero es la seguridad, y que se pueden caer y tal. Y yo toda esta reflexión la baso en que son profesionales, y el que menos cobra al año andará por unos 150.000 €, y que para ser ciclista profesional ya se tienen bastantes tablas como para saber dónde está el límite y hasta donde se quiere apostar asumiendo riesgos por ganar.
Aquí lo dejo, a lo mejor hay gente que le gustan los ataques a 1km de meta y las cuestas de cabras al 25%.
Yo tengo una postura muy clara respecto a este tema. El ciclismo se está convirtiendo a pasos agigantados en la nueva Fórmula 1, está aburriendo a las ovejas. Se quiere proteger tanto al ciclista y se está metiendo tanta tecnología que esto se está convirtiendo en una competición en la que lo único que está contando a la hora de la verdad son los watios por kilo que puede mover un tío, una fórmula matemática.
No puede ser que alguien ataque y todo el mundo primero eche mano al pinganillo para que le digan lo que tiene que hacer, y a continuación eche mano al garmin para poner unos watios/kilo/hora previamente estudiados para optimizar el rendimiento.
Yo lo primero que quitaba son los pinganillos (si se quiere que emita radio vuelta de los peligros que pueden surgir) y sobre la marcha quitaba los potenciómetros (que se usen para entrenar). Y por supuesto que metía etapas de pavés, al igual que etapas ya haya nieve, lluvia o viento, porque es la única manera de darle vida a este deporte que si ha llegado a ser lo que es ha sido por la épica (y el riesgo) que lo rodea, al igual que pasaba en la F1.
Y alguno me dirá que lo primero es la seguridad, y que se pueden caer y tal. Y yo toda esta reflexión la baso en que son profesionales, y el que menos cobra al año andará por unos 150.000 €, y que para ser ciclista profesional ya se tienen bastantes tablas como para saber dónde está el límite y hasta donde se quiere apostar asumiendo riesgos por ganar.
Aquí lo dejo, a lo mejor hay gente que le gustan los ataques a 1km de meta y las cuestas de cabras al 25%.