Semana de mucho, pero mucho curro, de esas que llega a casa reventao y si en la cama te roza la parienta le sueltas un ¡A mi me dejas eh!
Además los problemas gastro intestinales están dando mucho por culo, nunca mejor dicho. Hace unos quince días tuve que llevar tres muestras de heces, vamos, era tal la cantidad que pensé en soltar la tostá en un bolsa del mercadona y que se sirviesen a gusto. Cuando le solté los tarros y los tubos le dije "Vaya consulta de mierda ¿no?"
Bueno, el tema es que llevo varios días con fuertes dolores de lumbares, dorsales y rodillas, ya estoy viejo para tirarme tantas horas en lo alto de una escalera soldando y encima trabajo solo, y ayer me levanté andando como los de The Walking Dead, pero la bici es la bici y Nolotil no falta en mi casa.
Salimos a las 7:30 sin ruta establecida, pero los montes te dan mucho juego y a veces las mejores rutas son las que salen sin planificar.
Subimos por Los Locos y antes de llegar a la verja, vamos, unos 300 mts, yo ya iba en modo supervivencia, cada vez que empuja los pedales era como si me dieran un rodillazo en la espalda, pero la opción de darme la vuelta no era valida, además, tenemos un lema "Nadie se vuelve solo" así que apreté el culo al sillín y para arriba.
Llegamos a la curva "De la vida" donde, como es costumbre, paramos para descansar, beber y lo contrario a beber. Me tuve que tomar un "mongolito" (capsula de electrolitos) porque iba sudando como un cochino, tanto por el calor (íbamos de corto como en verano) como por el esfuerzo que estaba haciendo para no mandar a tomar por culo la bici.
Seguimos el camino en dirección a la Buitrera, pero al pasar por el cruce de La Cañada alguien soltó ¡No hay guevos! y que queréis que os diga, pero esa exclamación me puede ¿Que no hay guevos?!!! ¡¡¡ Aguántame el cubata !!! y me metí a subir La Cañada... Por supuesto mis compañeros detrás mío. La Cañada es un tramo mas para descenso.
Arrepentido desde el segundo 0 por haberme metido por allí, ya no me quedaba mas remedio (por vergüenza) que seguir hasta el final y mientras subía se me vino a la mente un verso de José de Espronceda 'Canción de la muerte'
Ven y tu ardiente cabeza
entre mis manos reposa;
tu sueño, madre amorosa;
eterno regalaré;
ven y yace para siempre
en blanca cama mullida,
donde el silencio convida
al reposo y al no ser.
No soy aficionado a la poesía, pero en 7º de EGB (creo) tuve que copiar 100 o 200 veces ese verso porque me lo salté cuando tuve que recitar el poema entero en clase.
Bueno venga, al tema, que como siga así, acabo hablando de la mili.
La cosa es que conseguí llegar hasta el final sin bajarme de la bici, pero me tuve que sentar en una roca y decirme para mis adentros: "Paco, para otra vez que oigas ¡No hay huevos! tu como si no lo hubieses escuchado"
Seguimos por el camino del Detalle y bajamos un tramo de carretera hasta la venta El Mirador para bajar hasta Los Almendrales, pero cuando mas a gusto y rápido iba para abajo ¡¡¡Zas!!! peñasco gordo y cámara trasera reventá, menos mal que a la cubierta no le pasó nada. Reventó porque iba demasiado flojo de presión.
Por fin llegamos al bar y al llegar a casa mi señora esposa me tenia una grata sorpresa... no, no es eso...
Aquí un buen primer plano de la bartola que gasto y que como podéis apreciar, es necesario el uso de las dos manos para mantener por lo alto del culotte.
A esta sorpresa me refería, malpensaos !!!
Lo de la cafetera no es roña, bueno si, pero es que esa es la mía y se nota que mi mujer ni la toca
Ver el adjunto 80888